Levantó polvo la presencia de Gerardo Fernández Noroña en fin de semana en Tamaulipas. En dos días el presidente del Senado recorrió cuatro municipios, Madero, Altamira, Victoria y Matamoros.
Sin pelos en la lengua, es un hombre cuyas opiniones generan controversia. Surrealista, ave de tempestades como le dicen algunos, llama la atención donde se presenta. Algunos le ven cara de presidenciable en 2030 y que anda en pleno “posicionamiento”.
La verdad es que no, por ahora. Vino a informar de los avances de reformas al Poder Judicial, en general de las 12 aprobadas por el Senado según iniciativas enviadas por el Presidente López Obrador y ahora por la presidenta Claudia Sheinbaum.
Es un tipo que no se “brinca las trancas”, siempre legal y disciplinado con la izquierda, aunque sea bravucón y claridoso con sus contrincantes, los conservadores.
Nacido en marzo de 1960, ha sido tres veces diputado federal, ahora senador. En dos ocasiones quiso ser candidato presidencial, pero declinó a favor de AMLO.
Su presencia en territorio cuerudo no es la actividad aislada, sino la de un grupo compacto que empuja en Tamaulipas bajo el liderazgo del Gobernador Américo Villarreal a favor de las reformas estructurales del Segundo Piso de la 4T.
Para comenzar, los eventos fueron programados por la senadora Olga Sosa Ruiz, no porque ella trate de hacer camino hacia la “esquina del poder” en Ciudad Victoria, sino como parte del engranaje para explicar al pueblo lo que sucede con los Ministros de la Corte que se quisieron convertir en poder absoluto en México.
Ella sabe que no son los tiempos de buscar posiciones sino de hacer talacha por la causa.
Tamaulipas es uno de los bastiones morenistas más importantes de México, siempre con lealtad y respondiendo oportunamente, como vemos en la aprobación de las minutas que vienen del Congreso de la Unión.
Será esta región del Seno Mexicano la primera que “acople” la Constitución Local con la federal en materia de reformas al Poder Judicial.
Lo interpretamos como un evento de unidad morena, no de futurismo a favor de alguien. Saben que necesitan construir un valladar que evite la entrada a opositores que tratan de descarrilar las transformaciones de la 4T, como dice el propio Fernández.
Acompañaron los tres senadores de MORENA por Tamaulipas. Saben bien que en Tamaulipas son los tiempos de Américo Villarreal. Con su presencia dejaron claro que así es.
No es época de vulgares ambiciones sino de respaldar también las acciones de la Presidenta Sheinbaum.
Ni en los tiempos de la “dictadura perfecta” del PRI se había dado tanta disciplina en el partido en el gobierno. Siempre existieron disidentes y guerras intestinas como el senador reynosense Antonio García Rojas, en los tiempos de Praxedis Balboa, o de Manuel Garza González cuando la sucesión de Ravizé, sin olvidar al madrugador Cavazos Lerma (senador) que se creía con más poder que Américo Villarreal Guerra.
Los alcaldes supieron responder: Tampico, Mónica Villarreal; Altamira, Armando Martínez Manríquez; Victoria, Eduardo Gattás, y Matamoros, Alberto Granados.
Igual de la semana anterior, decir que Tamaulipas y Matamoros en particular brillaron con la realización del Quinto Congreso Nacional de Actividades Espaciales 2024, organizado por el gobierno americanista como compromiso con el desarrollo científico y tecnológico.
Le echaron todos los kilos, desde remodelar el Centro de Convenciones Mundo Nuevo, un espacio descuidado por los últimos gobiernos municipales, para reunir a tres mil visitantes nacionales y extranjeros, así como los enlaces con la empresa SpaceX para fortalecer la industria aeroespacial.
Además de colocarnos en las nuevas fronteras de la tecnología y ciencia, tales eventos generan turismo de negocios y conocimiento.
Américo y algunos de sus colaboradores cruzaron al lado americano para visitar las instalaciones de la Starbase, el centro de lanzamiento de cohetes de SpaceX, junto con la Cónsul de los Estados Unidos en Matamoros, Brianna Powers.
Con ello se establece una relación colaborativa con la empresa de Elon Musk y sus proyectos de comercializar los viajes al espacio.
Hablando de política partidista, el PRI está por sacar su convocatoria para renovar la dirigencia estatal, presidencia y secretaría general. Acordaron que el método será asamblea de consejeras y consejeros.
En los próximos días el CEN, que es lo mismo que Alito Moreno, tomará el acuerdo de “sanción correspondiente” y aprobará la convocatoria. No se sabe que alguien haya levantado la mano.
Ahora, Doña Paloma Guillén es presidenta provisional, luego que en 2023 terminó el ciclo de Edgardo Melhem Salinas, quien a su vez había renunciado un año antes de terminar ejercicio.
Domingo de elección del CEN del PAN. No se esperan novedades, el elegido por la nomenklatura azul es Jorge Romero. Su contrincante Adriana Dávila les armaría toda una revolución para que se democraticen.