Alejandra Becerra Gómez, estudiante del octavo cuatrimestre de la carrera de Ciencias de la Comunicación y Medios Digitales de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), vivió una experiencia inolvidable al irse de intercambio a la Universidad Argentina De la Empresa (UADE), en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Durante su estancia en aquel país tuvo la oportunidad de aprender y conocer a nuevas personas, viajar y vivir un intercambio cultural que la ayudaron a tener una preparación de clase mundial. “Yo me acerqué a las oficinas de intercambio para decirles de mi inquietud de estudiar en Argentina, ellos me ofrecieron el catálogo de universidades con las que tienen convenio y una vez seleccionada la universidad comencé a hacer todo el proceso y contacto con la otra escuela”, explicó Alejandra. En la UADE tuvo la oportunidad de llevar materias como Publicidad, Medios Audiovisuales y Organización de Espectáculos; además que dicha institución le gustó mucho por ser moderna, tener un gran sistema académico que prepara a los alumnos con un enfoque empresarial y desarrollar competencias con trabajos prácticos reales. Para ella irse de intercambio va más allá de conocer otro País, ya que implica un crecimiento personal por todo lo que se aprende, se desenvuelve de una mejor manera, así como las personas que se conocen, la adaptación a otra cultura y la capacidad de vivir en otro lugar. “Un intercambio es un desarrollo personal y profesional que todos en algún momento de nuestras vidas deberíamos experimentar”, afirmó la alumna Alejandra Becerra Gómez. Todas las experiencias vividas, tanto académicas como personales, le ayudaron a que sus expectativas de irse de intercambio sí se cumplieran; de hecho, para aquellos que quieran irse a otro país les recomendó mantenerse abiertos a las experiencias que puedan vivir, ya que vale la pena hacerlo.Encuentro cultural Además, añadió que vivió un choque cultural entre México y Argentina porque el País Sudamericano es más neutro, la comida es diferente, la gente es más reservada, pero educada; mientras que México es más colorido y la comida es más picosa. “Comí asado, tomé mate y me enamoré de las medialunas. Argentina tiene tanta riqueza cultural, diversidad de pensamiento, pasiones y es un país con muchas cosas que descubrir”, agregó. “Una de las experiencias que más me gusto fue vivir su pasión por el futbol, ver a este país ser campeón mundial y levantar su tercera copa, tan importante para ellos, desde bebés hasta adultos mayores. Una fe y energía que sólo entiendes al vivirla y observarla”, dijo la estudiante de la UAG. El viaje que hizo a Argentina también le dio tiempo para hacer turismo, ya que visitó lugares como Mar del Plata, las Cataratas del Iguazú, conoció todo Buenos Aires, fue a teatros a disfrutar espectáculos de ópera y tango, cantó música argentina y presenció múltiples movimientos sociales que le permitieron entender un poco de la historia, problemáticas e ideologías del país. Por último, aconsejó a sus compañeros Autónomos que, si pueden tener una experiencia así, no duden en hacerlo y aprovechar las oportunidades de intercambio que la UAG les brinda. A la Autónoma le agradeció la oportunidad de realizar este intercambio e hizo un llamado a que se sigan fomentado estas experiencias estudiantiles que nutren la formación académica.