Es aprobada en Tamaulipas la Reforma al Código Civil Estatal que
permitirá los matrimonios igualitarios, con una elección de 23 votos a
favor, 12 votos en contra y 2 abstenciones.
Los legisladores que votaron a favor del matrimonio entre personas del
mismo sexo, lo hicieron prácticamente en secreto, es decir por cédula, a
excepción de la diputada local Nancy Ruiz que no tuvo objeción en
manifestar su total respaldo a la iniciativa.
Mientras el resto lo hizo en el anonimato a manera de que no queden
expuestos los nombres de los diputados y diputadas locales que dieron
el sí a la reforma que contraviene a los pensamientos, valores e
ideologías de los grandes grupos de creyentes y religiones que se
manifestaron a favor de la familia integrada por hombre y mujer como
lo marca el primer libro de la biblia en génesis 1:27.
Haciendo hincapié en estos hechos, y en la constante lucha que ejercen
los grupos de religiones para que prevalezca, ante todo, la figura de
familia tradicional (padre, madre e hijos). Hay quienes deducen que la
aprobación de matrimonio entre personas del mismo sexo es el camino
a la desorientación o a la ausencia de valores dentro de un clan, y de la
misma sociedad.
Todo ello, sin duda se contrapone a los derechos que los futuros
contrayentes se atribuyen, y que tienen en su contexto de ciudadanos
constitucionales; de aspirar y decidir legalmente con quien vivir y a
quién amar.
Cabe decir, que Tamaulipas fue la última entidad de la republica
mexicana en aprobar las uniones entre personas del mismo sexo.
Legislaciones anteriores evitaron en lo posible su aprobación. Prevaleció
resistencia como una forma de mantener a Tamaulipas alejado de la
práctica de ceremonias civiles frente a un juez, y que trascendiera en los
círculos de la sociedad tamaulipeca que en su mayoría es una sociedad
conservadora, y otras veces de doble moral.
La postura de la iglesia y sus feligreses es sustentada y a voluntad, de
la palabra escrita en el libro más antiguo del mundo que es la biblia. Por
esa razón, los cristianos, católicos, evangélicos, y otras denominaciones;
se han apegado a la doctrina que emana de los libros del antiguo y
nuevo testamento de la biblia en sus diferentes versiones, donde se
establece un compromiso de fe y fidelidad en principios, y la praxis en
los valores de la familia.
Cabe decir que cada madre, padre, o tutores son responsables de la
formación de su descendencia; y cada individuo en edad mayor es
responsable de sus propias acciones y decisiones. Corresponde a la
sociedad trabajar para que desde el núcleo familiar las prácticas de
respeto, amor, comprensión, ética y moral tengan solidez.
Sin absolutizar, todo indica que nos encontramos frente a una nueva
sociedad, en la que se requiere interacción social estable y de respeto.
Sin dejar de buscar la perpetuidad de la paz social, cultural y de la
libertad para profesar, externar y difundir las convicciones morales y de
fe, de forma individual o colectiva.
En tanto, el Gobernador del Estado, Dr. Américo Villarreal Anaya; dará
cumplimiento de la publicación en el Periódico Oficial del Estado de la
Reforma al Código Civil para que después entre en vigor.