Interpreto que el título de hoy se entiende como ‘un lapso de tiempo’, una breve interrupción del movimiento, acción o ejercicio… Es tardanza y quizá hasta lentitud.
En este sentido le comento que los precandidatos oficialmente registrados al gobierno de Tamaulipas, Durango, Aguascalientes, Oaxaca, Quintana Roo e Hidalgo, están por cerrar sus precampañas, entiéndase desde la teoría, es la propaganda solo entre sus militantes.
Es decir, apenas es la entrada de lo que se avecina y en la tierra de la Flor de la Tamaholipa, todo indica que pasarán 3 aspirantes: Las coaliciones Va por Tamaulipas (PAN, PRI, PRD) y Todos Hacemos Historia (Morena, PT, PVEM) y el Movimiento Ciudadano (MC).
Si todo sigue igual, se enfrentarán el de Xicoténcatl, César Verástegui Ostos, los victorenses Américo Villarreal Anaya y Arturo Diez Gutiérrez. Sin embargo pareciera que el Dr. Villarreal Anaya será sustituido, pues dentro de Morena sigue dando guerra Alejandro Rojas Díaz Durán.
Sigue la producción de información de los tres que supongo sobreviven a esta pausa, porque parece que los tres independientes se quedan en esta recta, que no es la final.
En otra pausa, confieso que lamento escribir que había pronosticado el problema diplomático en el que caería nuestro gobierno, no México, porque las declaraciones del presidente Manuel López no son a nombre de muchos mexicanos.
Aun así, hay que ver cómo interpreta el gobierno español las declaraciones que se están sumando a la pausa del decir presidencial mexicano.
Todo se recrudece en la campaña mediática permanente, desde el Palacio Nacional, el Monarca López, utilizó La Lagañera -según la bautizó el periodista Luis Repper Jaramillo- y pareció se le chispoteó como al Chavo del 8, el comentario sobre la pausa que habría que hacerse entre México y España.
Desde luego que la sorpresa de las declaraciones presidenciales, irradió a todo tipo de funcionarios seguidores a ciegas de la 4ª T, y le tocó a la Senadora, antes titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Limón, no saber definir ante los micrófonos de la prensa la palabra presidencial… “pausa es… pausa” dijo la elegante ex Ministra.
Sin excepción, el comentario mediático se dio en todos los niveles sociales, empresariales, políticos, etc., aunque no solo reconozco el conflicto diplomático que ahora se acentúa con España; también con el gobierno de Gringolandia que está a la expectativa por la famosa reforma eléctrica, pues se pudieran lastimar algunas situaciones del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (TEMEC).
Desde luego, no podemos obviar el tema de Panamá, que se negó a recibir como embajador en ese país a un académico con fama de violador y que fue sustituido por una lesbiana, confesa de drogarse y otras linduras. Por cierto, hubo comentarios sobre el nuevo rechazo de Panamá, aunque no hay información oficial.
El problema diplomático más reciente ahora es con el gobierno Español, pues se ha negado a guardar silencio y el ministro español, de Exteriores y Cooperación, José Manuel Albares, declaró que su país “…rechaza tajantemente las injustificadas declaraciones…” del presidente Andrés Manuel López Obrador, por los abusos que el mandatario asegura haber percibido de parte de algunas empresas españolas.
Manuel Albares dejó en claro en su comunicado que “España y México somos socios estratégicos y estamos unidos por profundos lazos humanos, culturales, históricos, lingüísticos y económicos. (…) España trabajará siempre por mantener las mejores relaciones con México y reforzar los lazos con este pueblo hermano”.
En el documento del Ministerio de Exteriores y Cooperación se hizo énfasis que, más de 175 mil españoles residen en México; y 30 mil mexicanos viven en aquél país europeo.
Quienes saben del tema, aseguran que la Madre Patria es el segundo país inversor en México con 7 mil empresas en el territorio nacional con una inversión por encima de 70 mil millones de euros.
Los españoles desean que las relaciones estén basadas en el respeto mutuo, “como quieren los pueblos de España y México, sin manifestaciones que dejen duda del respeto mutuo, por encima de cualquier tema.”
Pese a lo delicado del argumento, en la Lagañera del miércoles 9, el presidente López señaló a empresas como Iberdrola, Repsol y OHL, acusándolas de “promiscuidad económica”.
A pesar de la acusación directa del gobierno mexicano, la cancillería española insistió en que ambos países son socios estratégicos a los que unen profundos lazos humanos, culturales, históricos, lingüísticos y económicos.
La gran pregunta interesante… ¿Qué sigue? ¿Pausa? ¿En dónde?