La Magistrada Estela Platero Salado, a quien correspondió estudiar el asunto, determino que, Las transferencias electrónicas se realizaron con cargo a una tarjeta de débito (contrato de depósito), por ende, fueron hechas con recursos propios del tarjetahabiente, lo que se tradujo en una disminución en su patrimonio, ya que el banco dispuso de parte de su numerario por más de dos años, por lo cual, al anularse las transferencias deben reintegrar dichas sumas, pero adicionadas con los intereses, esto es, la disposición indebida genera intereses legales.
Por David Zarate Cruz/Reportero
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El Banco Santander deberá pagar intereses de dos años por 363 mil pesos, a un ciudadano de esta capital, una vez que dicha cantidad fue condenada a regresársela, por haberla sustraído mediante transferencias electrónicas sin su consentimiento, ya que mediante la ejecutoria 63/2021 Magistrados Federales, otorgaron el amparo para que dicha institución bancaria pague los intereses por dicha sustracción.
La Magistrada Estela Platero Salado, del Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y Civil del Décimo Noveno Circuito en Victoria, determino que, si en el caso, la institución bancaria depositaria del dinero de la parte actora, omitió restituir el monto de las transferencias no reconocidas a los titulares de las cuentas de depósito que contrataron, debe pagar los intereses legales en razón del seis por ciento anual, como lo reclaman los actores, en la demanda respectiva.
El 19 de noviembre del 2020, el Juzgado Primero Civil de Victoria, emitió la sentencia del juicio oral mercantil 813/2019, mediante el cual condeno al Banco Santander México, a regresar los 363 mil pesos al ciudadano; por haberlos sustraído mediante transferencias electrónicas; pero no condeno al pago de los intereses argumentado que no fue un crédito; ante lo cual el afectado recurre al juicio de amparo.
La Magistrada Estela Platero Salado, a quien correspondió estudiar el asunto, determino que, Las transferencias electrónicas se realizaron con cargo a una tarjeta de débito (contrato de depósito), por ende, fueron hechas con recursos propios del tarjetahabiente, lo que se tradujo en una disminución en su patrimonio, ya que el banco dispuso de parte de su numerario por más de dos años, por lo cual, al anularse las transferencias deben reintegrar dichas sumas, pero adicionadas con los intereses, esto es, la disposición indebida genera intereses legales.
El pleno judicial emite la sentencia ejecutoria otorgando el amparo para que el Juzgado Primero Civil de Victoria, deje insubsistente la sentencia reclamada y en su lugar emita otra, en la que reitere la nulidad de las transferencias electrónicas impugnadas y condene a la parte demandada al pago de intereses legales respecto de los importes que se transfirieron sin el consentimiento, teniendo en cuenta la fecha y los importes de las transferencias realizadas