Ayer, en un video difundido en todo el país, y que seguramente es apenas el inicio de una campaña nacional, el político, politólogo y escritor mexicano, miembro cofundador de MORENA, Alejandro Rojas Díaz Durán, dio a conocer su renuncia como senador suplente de Ricardo Monreal.
Ahí mismo anunció que da inicio a un recorrido por la república, donde buscará el apoyo de los ciudadanos, para lograr el liderazgo del Movimiento Nacional de Regeneración Nacional. Este proceso de renovación, tendrá su punto culminante en noviembre de este mismo año.
De esta manera, Alejandro le está ganando la jugada al grupo Polevnsky, que pretendían expulsarlo de sus filas, después de que, el alumno de Porfirio Muñoz Ledo, les ha estado haciendo fuertes señalamientos, por antidemocráticos, y fuertes sospechas de venderse a los gobernadores en turno, como es el caso de Tamaulipas.
Dura la pelea que se le viene encima a Polevnsky, pues Díaz Durán no es ningún flan, sino todo lo contrario. En primer lugar, es un hombre preparado en ciencia política, administración pública, filosofía y periodismo.
Pero lo más importante, es de qué grupo emerge, y al cual se debe. Analicemos de quien es el mejor amigo, y el mejor alumno: amigo de Ricardo Monreal, líder indiscutible del senado de la república, y el mejor alumno de Porfirio Muñoz Ledo, el gurú político que AMLO ha colocado al frente de la cámara de diputados.
Yeidckol se está peleando con los dos estrategas más relevantes del Congreso de la Unión. Es decir, se está aventando un pleito, con el grupo político de mayor peso, en el tablero obradorista.
Por cierto, hablando del tema Polevnsky, y más específicamente de su candidato Miguel Barbosa en Puebla, ¿se acordará Barbosa, que en Octubre de 2015, todavía desde el PRD, declaró al Diario Reforma, que AMLO era un populista y un simulador, pues a raíz de que Obrador visitó al Papa, era señalado por el actual candidato moreno en Puebla, y entonces coordinador de la bancara perredista, como alguien que buscaba capitalizar al Vaticano, en su carrera rumbo a la Presidencia?
Claro, que en aquel entonces, Barbosa comía de la mano de Enrique Peña Nieto. Esos son los amigos de Polevnsky, los peñistas, y sobre todo los salinistas. Pregúntele a Raúl Salinas, de que whisky le sirvieron a Yeidckol, cuando ambos brindaron en la misma mesa, en el cumpleaños de Diego Fernández de Cevallos.
Con estos antecedentes, ahora nos podemos explicar, porque las justas críticas y señalamientos contra Polevnsky, no solo han continuado, sino que han subido de tono. Es decir, Rojas Díaz Durán ha estado muy cercano al Presidente AMLO, y sí anuncia que se lanza, es porque el primer jefe del país, lo está avalando. Así de claro.
¿Y a Barbosita cómo le irá en Puebla? El PAN ya no gana, pero, pero, podría haber voto cruzado a favor de un tercer partido. Upsss.
–“MI PARTIDO ME ORDENí“ QUE NO DEJARA ENTRAR A LA PRENSAâ€, DIJO AOYAMA—
En un inicio, pensé que este chavo, jefe de Prensa de MORENA, era más honesto y que verdaderamente tenía principios ideológicos consistentes.
Creí en su valía política, como titular de la cartera de divulgación, en un partido de izquierda amplia y democrática. Esta era la imagen que había proyectado MORENA, entre la sociedad, al culminar el proceso 2018.
Aoyama solía invitarme vía Whatsapp a las conferencias y en una ocasión, hasta me llegó a solicitar apoyo para una entrevista con la senadora Guadalupe Covarrubias, a la cual, aunque no lo confiesa, parece que le tiene fe como futura candidata a gobernadora.
Posteriormente este Guillermo Aoyama, o Memo Aoyama, se creció. Ya no era aquel especie de sacristán que llegaba para preparar las misas mediáticas con los “sacerdotes†morenistas.
El “Camarada†Aoyama, empezó a contaminarse con la ambición política, la misma ambición que empezó a retozar en el Comité estatal de su partido. A tal grado llegó su artesanal avaricia política, que lo llegaron a incluir en las listas para una diputación local, imagínese la locura que se llegó a apoderar de la burocracia morenista, en la cúpula de la membresía Polevnskiana.
Se emocionaron, y llegó el momento en que se olvidaron de que eran los que más cordura deberían demostrar, como dirigentes estatales…, y nada, fueron los que encabezaron el desenfreno político y la calentura por las candidaturas.
El colmo con este joven burócrata de la dirigencia MORENA, fue el día en que arribó el Delegado enviado desde el CEN, Marco Cruz Martínez. Ese día, en el salón del hotel Santorín, los morenistas afines a Polevnsky montaron la primera farsa, a la que le seguirían muchas, todas enfocadas a destruir la unidad de este partido en el estado.
La tarea formal de Cruz Martínez, era la de ser árbitro del proceso interno, pero se puso la camiseta de uno de los equipos, y con ello, operó como un jugador dopado, o sea como juez y parte. La consecuencia, fue que en lugar de fortalecer a MORENA, lo resquebrajó.
La culminación de esta labor de división y debilitamiento, culminó con la que llevaron a cabo en el Salón Las Fuentes. Solo acudieron los alcaldes de Gí¼emez y Cruillas. Y para colmo, Polevnsky los dejó solos.
Se sabe que la Yeidckol solo viaja a Tampico, para reunirse con el empresario ílvaro Garza Cantú, supuesto padrino de Héctor Garza el Guasón, aunque, con un poquito de perspicacia, podemos llegar a la conclusión de que, Alvarito quiere en realidad para él la gubernatura, con el apoyo de su poderoso hermano Ramiro. Aunque no se animan a sacar la cabeza, porque no quieren meterle un solo cinco al proyecto. Tienen fama de que les duele el codo. Y prefieren, llegado el momento, ir a la segura.
Los hermanos Garza Cantú han tejido también alianzas de negocios con el gobierno estatal panista. Si alguien entrevista a ílvaro sobre el escenario tamaulipeco, pues habla maravillas del progreso del sur, y describe toda la parte bonita del asunto, ocultando la costra de la inseguridad.
Al fin empresarios de alcurnia, no quieren arriesgar nada, hablando de temas perdedores, y buscan colocar sus fichas en varios lados. Aunque, al menos en apariencia, el plan A de ílvaro, es el Guasón. En otros tiempos, cuando fue candidato del PRD a la gubernatura, ílvaro pudo haber llegado, pero le volvió a ganar el síndrome regio de la tacañería. Hoy cultivan la amistad de Polevnsky, y buscan beneficiarse del agua revuelta en Tamaulipas.
Pero, volviendo con el tema de la supuesta reunión de unidad de este fin de semana, lo peor, es que no permitieron el ingreso de la prensa. Le llamé a Aoyama, y le reclamé su actitud de no permitir la entrada de los periodistas:
—-Como es posible que, tu que te dices de izquierda y afín a las ideas democráticas, incurras en una actitud de segregar a los medios de comunicación que seguimos desempeñando un papel importante, entre el poder político y la sociedad civil.
Me dijo textualmente: “Yo solo recibo ordenes de mi partido. Y desde México me ordenaron que no dejara entrar a la prensaâ€.
Ahora se sabe que, Polevnsky y el gurú Héctor Díaz Polanco, ordenaron, meter cerrojo a la reunión de las Fuentes. Una reunión morenista, que fue de todo, menos de unidad.
Obviamente, la hipotética debacle del morenismo en el estado, trae super contentos a los panistas. Acaban de publicar una foto en las redes, donde aparecen todos los candidatos en la foto, o sea el mensaje para MORENA, no puede ser más elocuente.
Pero la cosa no paró ahí, pues en una fiesta de este fin de semana en el Casino Victorense, se dice que el doctor Xico y Arturo Soto, andaban eufóricos y burbujeantes, prodigando abrazos, a diestra y siniestra.
Arturo Soto ya se siente seguro de derrotar a Irma Sáenz Lara, y en su caso, la que en un inicio era vista como una desconocida, la parienta Pilarica Gómez Leal, hoy, según algunos de sus seguidores, piensa que va a derrotar al dirigente estatal moreno José Antonio Leal Doria.
Y es que, con los candidatos que sacaron los morenistas, al menos en la mayoría de los distritos, no tienen que los avale, más que la marca AMLO… nos preguntamos si esto les va ser suficiente, sobre todo, si ya no van a contar con el apoyo de los grupos operadores, que metieron el hombro en la federal del 2018.
Hoy, muchos de ellos, aquí en Victoria, como el grupo de Vanessa Mata y Lalo Gattas, no creemos que se vayan a ir con el PAN, pero sí se van a subir a la barda. Y todo por la soberbia con que han sido tratados. Y es que hay algo que los polevnskyanos se niegan a aceptar: de ese más del 48 por ciento que obtuvo AMLO en Tamaulipas, cuyo equivalente fue de 784 mil 984 votos, el 90 por ciento fue de la sociedad civil, y de todos los ciudadanos libres, muchos de ellos que antes habían sido apáticos al tema electoral. Solo el diez por ciento fue de MORENA. Ese es el riesgo de que hoy estén cerrando el partido a toda la gente.
Imagínese si en el 2018, AMLO logró derrotar al gobernador García Cabeza de Vaca, que había obtenido en 2016, una elección histórica de 721 mil 049 votos, en las elecciones por el Congreso local que se avecinan, las dos marcas, la de AMLO y la de CV vuelven a estar en juego, cuál va a ser el resultado?