A nadie convenció el Plan de Acciones Emergentes para garantizar la seguridad y vida de las mujeres y niñas en México, que anunció la titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero Dávila durante la conferencia matutina de ayer del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Si bien es cierto que no desaparecerá el programa de refugios para las mujeres y niñas víctimas de la violencia, el hecho de que el recurso federal será entregado a los municipios en lugar de las organizaciones civiles que se han encargado de proteger y orientar a quienes tuvieron que huir de sus hogares ante el peligro de perder la vida.
La consultora en Derechos Humanos, Lía Limón García, entre otras muchas activistas, criticó abiertamente que los recursos federales se entreguen a los municipios con el pretexto de recobrar la rectoría de las políticas públicas.
Teme que el funcionamiento de los refugios se burocratice como otros programas sociales, ya que se improvisarán a los empleados de los municipios para hacerse cargo del cuidado y orientación de las mujeres y niñas víctimas de la violencia en lugar de gentes con experiencia y capacidad.
Limón García también criticó el hecho de no aplicar la misma política en torno el programa de Estancias Infantiles, luego de que la propia secretaria Sánchez Cordero Dávila, reiteró que se había cancelado y no había marcha atrás en perjuicio de hijas e hijos de las madres trabajadoras.
Como se recordará, Limón García fue la encargada del diseño e implementación del Programa de Guarderías y Estancias Infantiles cuando estaba al frente de la Dirección General de Políticas Sociales de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), por lo que conoce muy bien del tema y con datos precisos habló el impacto negativo que tendrá esta decisión en la formación de niñas y niños de las madres trabajadoras en el país.
A propósito, varios legisladores del PAN y del PRI revelaron que gentes de Morena, que se presentan como “siervos de la naciónâ€, a fin de realizar un censo para tener acceso a los programas sociales de la Secretaría de Bienestar a cargo de María Luisa Albores González.
Se les ha visto en varios municipios de Tamaulipas, como es el caso de Nuevo Padilla, en donde han recorrido casi toda la cabecera municipal para tener información de las personas que pueden ingresar a los programas sociales antes de que se celebre la elección local del próximo 2 de junio.
De regreso al Plan de Acciones Emergentes que se dio a conocer ayer en la conferencia matutina del presidente López Obrador, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylbermann , destacó el papel que juegan los refugios para la protección de las mujeres y las niñas violentadas, por lo que continuarán pero con la rectoría del estado.
No hay que olvidar que los refugios atienden alrededor de 20 mil mujeres víctimas de la violencia cada año en nuestro país, por lo que resulta de vital importancia que la administración del presidente López Obrador deje de experimentar con nuevos métodos y mejore aquellos lugares en donde se ha protegido y orientado a quienes huyen de sus hogares para salvar la vida.
Más vale corregir las fallas en los actuales refugios, que experimentar nuevas medidas que pongan en peligro la vida de mujeres y niñas víctimas de la creciente violencia en nuestro país.
En otro tema, la senadora María Guadalupe Covarrubias Cervantes luego de asistir al primer foro de la Nueva Política Energética para el Bienestar de México, celebrado el pasado lunes en la Expo Tampico, hizo el ridículo cuando no supo responder a la pregunta de un reportero acerca de la importancia del evento que presidieron en forma conjunta la titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle García y el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.
La legisladora de Morena no se preocupó por documentarse acerca de la importancia que tiene la generación de energía para Tamaulipas, sobre todo cuando se cuenta con parques eólicos para producir energía limpia y abastecer de electricidad a empresas del corredor industrial, además de la extracción de gas natural en la Cuenca de Burgos y la rehabilitación de la refinería de Madero, entre otras alternativas de energía en la entidad.
Se nota que la senadora Covarrubias Cervantes no tiene interés por conocer las necesidades de Tamaulipas para consolidarse como una entidad generadora de energía, puesto que ni siquiera abogó para la restitución de las rondas petroleras 2.3 y 3.3 que fueron canceladas por la Sener.