CIUDAD VICTORIA, TAM.- Debido a la cuesta de enero, el sector restaurantero de Tamaulipas se ha visto obligado hacer ajustes del personal que fue contratado por la temporada decembrina, complicándose más con el tema de la inflación y el aumento salarial.
En este sentido, Pablo Reyna Quiroga, vocero de la CANIRAC Tamaulipas, indicó que se espera que la gente haya guardado reservas de lo de diciembre y que por lo menos en las primeras semanas el impacto no sea tan fuerte, sin embargo, como cada año, los empresarios tienen su “guardadito” para lo que se viene de la baja de circulante a consecuencia de la llamada cuesta de enero, que año con año se registra.
Por su parte, Eduardo Salman, presidente de CANACO Victoria, admite que enero y los meses subsecuentes son difíciles para las empresas porque el circulante baja y no hay ventas, aunque hay quienes a manera de previsión guardan para hacer frente a los problemas que derivan de la cuesta de enero, la gente viene de una temporada de mucho gasto por los regalos, cenas y festejos de Navidad y fin de año, por ello es que ya no cuenta con recursos suficiente y se aprieta el cinturón.
Señaló que las ventas en el comercio local de Victoria por lo general se desploman entre un 20 a un 30 por ciento de un mes a otro, y si ahora se le suma el tema de la altísima inflación que tenemos, el alza a las tasas de interés, el aumento del 20 por ciento al salario mínimo y otros, las condiciones para los comerciantes es un año muy complicado, muy difícil que tendremos que sortear y con el optimismo de que autoridades diseñen estrategias de apoyo a la economía en estos momentos. (José Luis Ávila)