Nuevo Laredo, Tamaulipas. — Una fuerte movilización ciudadana se desató en esta ciudad fronteriza luego de que elementos del 16.º Regimiento de Caballería Motorizada del Ejército Mexicano fueran señalados por presuntamente robar 50 mil pesos, mil dólares y varios teléfonos celulares a tres jóvenes durante una revisión de rutina. Uno de los afectados es menor de edad.
El hecho fue denunciado en vivo por Miguel Ríos García, comerciante local y padre de una de las víctimas, quien transmitió a través de redes sociales una persecución que se extendió por más de tres horas y que involucró a un camión blindado y dos patrullas militares.
La situación provocó una reacción inmediata de la ciudadanía, que se organizó y logró interceptar las unidades oficiales sobre el bulevar Adolfo Ruiz Cortines, bloqueándolas para exigir la devolución del dinero y esclarecer los hechos.
Durante la huida, los vehículos militares habrían conducido a exceso de velocidad, en sentido contrario y brincando camellones, lo que derivó en varias colisiones, incluida una contra el vehículo del denunciante.
Una vez detenidas las unidades con número oficial 0916339 y 0916549, el oficial al mando reconoció haber efectuado la revisión, aunque negó el robo. Sin embargo, devolvió parte del dinero: mil dólares y dos mil pesos, y se comprometió a regresar el resto en una negociación informal.
Al lugar llegó también el coronel David Gonzales Carrasco, comandante del regimiento, quien evitó declaraciones oficiales y se negó a firmar un acuerdo formal, pese a que, según testigos, presentaba aliento alcohólico. Finalmente, ofreció cubrir el faltante de dinero y los daños al vehículo particular del comerciante.
El abogado Roberto Puente, representante legal de la familia afectada, confirmó que se presentará una denuncia penal por los delitos de robo, abuso de autoridad y daños. “Aunque me arreglen la troca y me den lo prometido, la denuncia sigue”, afirmó Miguel Ríos.
Hasta el momento, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) no ha emitido ningún comunicado oficial sobre el incidente, mientras en redes sociales aumenta la indignación y el reclamo de justicia por parte de la ciudadanía.
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