En un paréntesis de temas políticos, vale la pena el comentario de una persona que tuvo la maestría de convertir un pasaje cotidiano en poema, de esas vivencias a diario, del acontecer de todos los días, escribió y cantó a los hispanoparlantes de este y de aquél lado del charco.
Cuando un amigo se va…es una canción emblema del cantautor Alberto Cortez de 79 años de edad que muere hoy jueves en un hospital a las afueras de Madrid, en Mósteles, muy cerca de su residencia.
El verdadero nombre del poeta cantautor es José Alberto García Gallo, nacido en Rancul, La Pampa, Argentina, el 11 de marzo de 1940 es más conocido por su nombre artístico Alberto Cortez, a quien se le ubicó en los géneros de la canción latinoamericana, el bolero, la balada y la trova.
Los poemas que escribió el argentino, fueron hechas canciones de éxito, florecieron como verdades que invitan a la bohemia, a la nostalgia, a la fiesta sin escándalo, a la reflexión de la vida… “Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío, que no lo puede llenar, la llegada de otro amigo…â€
Los anuncios de los conciertos de Alberto Cortez, todavía siguen en algunos sitios de internet, pues la muerte de Alberto Cortez fue sorpresiva, pese a que ingresó al hospital desde hacía una semana.
Yolanda Díaz, productora del concierto que iba a dar en Puerto Rico el pasado domingo, fue quién anunció la muerte del argentino y aseguró que es a la familia del poeta a quien le corresponde dar los pormenores de su fallecimiento.
“Cuando un amigo se va, queda un tizón encendido, que no se puede apagar ni con las aguas de un río… Cuando un amigo se va, una estrella se ha perdido, la que ilumina el lugar, donde hay un niño dormido…â€
Independiente del mensaje de las canciones de Alberto Cortes, la forma extraordinaria de interpretarlas, sin prisas, con voz muy clara y pausada, siempre inspiraron al análisis, a la reflexión.
«En un rincón del alma», «Callejero», «Mi árbol y yo», «A partir de mañana», «Te llegará una rosa», «Castillos en el aire», «Cuando un Amigo se va» o «El Abuelo», entre otros temas, Cortés es responsable de más éxitos de la música latinoamericana.
La productora Yolanda Díaz aseguró que antes de presentarse en San de Puerto Rico, se tenía en calendario una presentación en el Teatro Nacional de Santo Domingo, en la República Dominicana.
Entre los premios y reconocimientos se pueden contar cuatro Discos de Oro, cuatro Heraldos de Oro y la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes; participó en el Festival de Palma de Mallorca.
La historia de los Dos Albertos surge cuando en 1960 el cantante argentino José Alberto García Gallo de apenas veinteañero, llegó al casino de Knokke, una localidad en Bélgica, donde cantaba el peruano Alberto Cortez, quien posteriormente fue conocido como «El Original».
El Cortez peruano en ese momento triunfaba como cantante de música tropical y había grabado varios discos con el nombre «Alberto Cortez» en Perú, Venezuela y España, también había actuado en la inauguración de la Televisión Española (TVE), había participado en la película «Faustina»
Alberto Cortez, «El Original», narra en su libro autobiográfico Yo Sí Soy Alberto Cortez, donde acusa al argentino, Alberto García Gallo, de suplantación de persona, por lo que el peruano enjuició al poeta argentino, por lo que se vio forzado a abandonar Bélgica.
En septiembre de 1965 la historia de los Dos Albertos fue un escándalo mediático en Portugal cuando el peruano denunció como ‘suplantador’ a García Gallo y el argentino retó al peruano a través de la prensa.
En 1966, el peruano Alberto Cortez registró en España el nombre comercial «Alberto Cortez», enjuició al argentino y consiguió detener a García Gallo en Barcelona, finalmente, usted conoce el colofón de este tema.
Alberto Cortés, el poeta cantautor argentino, nacionalizado español, según algunas fuentes no oficiales, falleció el jueves 4 de abril de 2019, por causa de una hemorragia gastrointestinal, en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur, en Móstoles, en la Comunidad de Madrid, España.
“Cuando un amigo se va, se detienen los caminos, y se empieza a revelar, el duende manso del vino… Cuando un amigo se va, queda un terreno baldío, que quiere el tiempo llenar, con las piedras del hastío…†Alberto García Gallo (Alberto Cortés) 1940-2019.